El silencio es más frío por lo que deja de ser que por lo callado que es.
Hay que estar preparado para enfrentarse a él en cualquier momento, saber ser tan gélido y cristalino como un muro de hielo, imponente, alzado sobre el horizonte; para después ser tan cálido cómo los rayos de sol que lo derritan poco a poco.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Puedes poner aquí si te a gustado o no, una crítica, lo que tienes de comer hoy o lo que quieras...